INVESTIGANDO SOBRE LA PROTECCIÓN DE LOS ECOSISTEMAS
Opciones que están en tu mano:
EL PAPEL
Los países industrializados somos los mayores consumidores de papel del mundo. En la escuela, el papel es imprescindible. No podemos concebir una sociedad o una escuela sin papel, aunque sí reducir su consumo o, al menos, no perjudicar tanto al medio ambiente y a los Bosques Primarios.
Según datos del World Watch Institute,12 más del 40% de la madera talada industrialmente en el mundo se dedica a la producción de papel. En España, cada persona utiliza una media de más de 170 kilos de papel al año, unas 15 veces más que la cantidad usada por nuestros bisabuelos. Y durante un solo curso escolar, una clase consume unos 7.500 kilos, casi tanto como lo que pesa un elefante adulto.
Así, gastamos y gastamos papel sin pensar que cuanto más papel se utiliza, mayor es la presión ejercida sobre los últimos Bosques Primarios. Especialmente el “papel blanco” de fibra virgen. En cada hoja de papel de fibra virgen se puede “esconder” madera de un Bosque Primario. Sin embargo, hay otra clase de papel que no necesita derribar ningún árbol para producirlo: el papel amigo del medio ambiente o papel reciclado y ecológico.
En el año 2002, en España se consumía algo más de 170 kilos por habitante y año. Y se recogió para su reciclaje 84 kilos por habitante y año, lo que supone únicamente el 49% del papel consumido.13
Objetivos a lograr:
● Ahorrar papel. Por ejemplo, aprovechando las dos caras de un folio o sustituyendo los pañuelos de papel por los de tela.
● Siempre que sea posible, el material escolar será de papel o cartón reciclado: los folios, el papel higiénico, las toallas y servilletas de papel, el papel de dibujo, las cajas y archivadores, etc.
EL MATERIAL ESCOLAR
El papel no es el único producto en las escuelas que procede de la madera. En la Secretaría, por ejemplo, se encuentran sellos y ficheros, casilleros, botes de lápices, reglas, sacapuntas, archivadores y, por supuesto, lápices. Probablemente, muchos de estos productos sean de madera y es posible que procedan de algún Bosque Primario.
Ya que existen algunas alternativas, se puede intentar comprobar de dónde procede la madera de estos productos. En la medida de lo posible, se deben comprar artículos que garanticen que no se destruyó ningún bosque virgen.
Objetivos a lograr:
● Comprar material escolar/oficina que no provenga de la destrucción de Bosques Primarios. Recurrir a productos reciclados, fabricados con madera de bosques locales, o aquellos artículos que se distinguen con una ecoetiqueta: para la madera, el certificado FSC; para los productos de papel, el Ángel Azul. Los materiales escolares más comunes son los archivadores de cartón, los lápices de madera, las reglas, los sacapuntas, los casilleros de madera, los botes de lapiceros, etc.
● Además, podemos usar madera reciclada en las pequeñas reparaciones que se lleven a cabo, o en la clase de tecnología. Si no es posible, se puede recurrir a la madera que no proceda de la destrucción de bosques vírgenes. Lo ideal es que provenga de bosques y empresas de nuestro entorno más cercano. Y que posea, a ser posible, un certificado FSC.